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En su primera entrega, 21 dÃas dará a conocer, desde un primerÃsimo plano, el cruel mundo de la indigencia. Durante esas tres semanas completas, Samanta Villar convivirá en algunos de los rincones del núcleo urbano junto a los "sin hogar".
Situaciones tan duras y difÃciles como dormir al raso se pondrán de manifiesto en esta primera entrega. Una tienda de campaña detrás de un centro comercial o los soportales de la Plaza Mayor de Madrid son lugares donde Villar compartirá experiencia con otros protagonistas cuya vida transcurre entre cartones, frÃo y soledad.En su estreno, la periodista convivirá con personas como Manuel, un "sin hogar" de 51 años que vive a la intemperie desde hace 14. O con Saib, que "descansa" en un coche abandonado rodeado de basura con el frÃo como único acompañante.
Cualquier sitio es válido para dormir. Desde cajas de cartón en la céntrica Plaza Mayor de la capital de España, hasta cajeros automáticos, pasando por tiendas de campaña. Igualmente, los lavabos de los parking o del aeropuerto se convierten en improvisados aseos.21 dÃas que estarán llenos de rutina. Caminar, buscar comida, sentarse en un banco a descansar y dormir. Son los cuatro aspectos en los que se reduce la vida de los "sin hogar". Si la suerte está de cara, podrá entrar en algún albergue a comer. Eso si no tiene que elegir entre llevarse el único plato caliente a la boca o ducharse.
El consumo de drogas siempre es un tema candente en nuestra sociedad. Las estadÃsticas dicen que cada vez se consumen a edades más tempranas y en mayor cantidad.Los parkings, parques, discotecas...son lugares donde la venta y el consumo de drogas se dispara.
Además, el último informe elaborado por la Comisión Europea indica que, "no hay ninguna prueba de que se haya reducido el problema", ni existe "ningún elemento" que haga pensar que el acceso a las sustancias ilegales sea "más difÃcil".En lo que respecta al consumo de cannabis, el informe señala que forma parte de la adolescencia de los jóvenes de los paÃses occidentales y que el consumo de esta sustancia se ha "banalizado".
Casafumando Pero...¿cuáles son los efectos del consumo de cannabis? ¿qué efectos tiene en nuestra conducta? ¿y en nuestras capacidades intelectuales? ¿qué peligros conlleva un consumo continuado de esta droga? Samanta Villar se pasará 21 dÃas fumando droga para dar respuesta a estas preguntas.
El programa se despide con uno de los temas de mayor controversia en la sociedad española: la inmigración ilegal.En Huelva existe una finca conocida como Las madres, un pinar donde han llegado a sobrevivir casi 2000 africanos en condiciones infrahumanas. Sin agua potable, sin asistencia sanitaria y durmiendo en chabolas que construyen con los plásticos que ya no usan los invernaderos.
Y este es precisamente el lugar que ha elegido 21 dÃas para que la periodista Samanta Villar conviva con la realidad más dura de la inmigración ilegal.Serán 21 dÃas como una "sin papeles" más. Ingeniándoselas para construir una chabola en la que vivir, durmiendo sobre un palé tras haber tenido que hacer cola en la parroquia del pueblo para conseguir una bolsa de comida y yendo cada dÃa a buscar leña para calentar el agua de su "ducha".
Como ellos, trabajando en los campos de fresa siete horas agotadoras, machacando su espalda para conocer de primera mano el duro trabajo de los temporeros. Durante 21 dÃas y 24 horas al dÃa, Samanta compartirá con algunos de estos sin papeles sus insalubres y precarias condiciones de supervivencia, asà como la dureza del trabajo por el que pelean a diario. Como ellos, Samanta se enfrentará a largas jornadas de trabajo en la recogida de fresas.
La historia que cuentan los "sin papeles" es la misma para todos. En determinado momento de su vida se dejan conquistar por el "sueño europeo". Deciden que lo que les cuentan y lo que ven en las series de televisión es cierto. Empeñan propiedades, piden créditos o venden casas hasta reunir el dinero que les cobrarán (o robarán) por una patera.
Pero la realidad al llegar a Europa es bien diferente a lo que esperaban. No tienen trabajo ni tampoco dinero para desplazarse a otro lugar, y si la policÃa les encuentra, se arriesgan a ser deportados. España encabeza el ranking europeo en número de inmigrantes ilegales: hay más de 945.000 ilegales en España. No obstante, el Gobierno sostiene que la cifra de ilegales no supera las 300.000 personas. 21 dÃas va más allá de las cifras estadÃsticas para presentarnos casos como el de Mousa, un joven de Mali que, al cumplir los 21 años, inició una amarga odisea que culminarÃa con su llegada a Canarias; en los cinco años que lleva en España sólo ha trabajado un mes. También Hamidou llegó desde Mali, paÃs en el que se encontraba asilado tras huir de la Guerra Civil que consumÃa Costa de Marfil, y que destruyó su familia. Llegó a nuestro paÃs en patera y hoy se encuentra a la espera de que un juez decida si le considera refugiado por razones humanitarias. Mientras, ha recogido fresa en Huelva, ha trabajado la oliva en Córdoba y ha cortado madera en los bosques de Segovia.
La periodista Samanta Villar vivirá en su propia piel la realidad de las personas que sufren alguno de los diversos trastornos ligados a la conducta alimenticia21 dÃas sin comer.
Tras convivir con las personas sin hogar soportando frÃo y penurias, Samanta Villar dejará de comer durante tres semanas -siempre bajo seguimiento médico- para explorar los cambios fÃsicos y psÃquicos que sufre su organismo.
En su experiencia convivirá con personas que padecen enfermedades como anorexia o bulimia.Samanta seguirá un riguroso control médico desde la Unidad de TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria) de un hospital madrileño. Esta Unidad realizará pruebas para ver qué cambios sufre Samanta después de 21 dÃas, viviendo 24 horas al dÃa en ayuno.La doctora que hará el seguimiento a Samanta le advertirá de lo peligroso de su experiencia: el riesgo es muy alto porque algo podrÃa cambiar en su cerebro y degenerar en una anorexia nerviosa.
Es más, unos dÃas después de someterse a esa experiencia, Samanta comienza a desarrollar conductas asociadas a la enfermedad. Samanta se marea, se asusta y termina llorando sin saber muy bien por qué.
Samanta Villar se somete a una nueva experiencia durante 21 dÃas, poniéndose en forma de la mano del entrenador personal de estrellas de Hollywood, Fernando Sartorius. El programa muestra cómo muchas personas llevan el culto al cuerpo al extremo, a lÃmites que pueden resultar incluso peligrosos.
Cuando justo ya ha empezado la operación bikini, la sociedad pide cuentas a su cuerpo. La imagen, para muchas personas, lo es todo, pero ¿qué provoca que deseemos desesperadamente obtener un cuerpo 10?, ¿a partir de qué momento estar en forma se convierte en una obsesión? Samanta Villar se somete a una nueva experiencia durante 21 dÃas, poniéndose en forma de la mano del entrenador personal de estrellas de Hollywood, Fernando Sartorius, que ha hecho estilizar figuras como la de Nicole Kidman, Salma Hayek, Tom Cruise o Elsa Pataki.Durante estos 21 dÃas, la periodista sigue una cuidada y estricta dieta en la que se ha combinado ejercicio fÃsico y nutrición, lo que le dará grandes progresos en su estado fÃsico.
Paralelamente al entrenamiento, Samanta se somete a un chequeo médico justo antes de iniciar la experiencia y al finalizarla para comprobar el estado de salud.El programa mostrará cómo muchas personas llevan el culto al cuerpo al extremo, a lÃmites que pueden resultar incluso peligrosos... La periodista recogerá el testimonio de gente anónima y de personajes más populares que han hecho de los gimnasios un auténtico santuario y del ejercicio una religión.Además del entrenador de las estrellas, Fernando Sartorius, Samanta estará con personas que entienden el ejercicio como una forma de vida, jóvenes que prefieren no tener una vida social por entregarse en cuerpo y alma al gimnasio.Samanta conocerá a Francisco Mula, un ex boxeador de 50 años, campeón del mundo y Mister Universo de culturismo, que sigue una curiosa dieta: su desayuno consiste en una tortilla de 14 claras de huevos y el resto de las comidas son 1 kilo y medio de pechugas de pollo y 750 gramos de arroz, además de un par de piezas de fruta y complejos vitamÃnicos.La periodista estará también con MartÃn Mazza, uno de los actores porno gays más importantes del mundo.
Va al gimnasio dos veces al dÃa y hasta tres veces al año se somete a ciclos de anabolizantes para mantenerse. Otro protagonista será Eric Putzbach, colaborador de televisión y obsesionado con su propia imagen. Eric ya es un asiduo al quirófano y se ha sometido a múltiples operaciones de cirugÃa estética.Durante estos 21 dÃas, Samanta se acerca a casos reales de personas con clara devoción a su propio cuerpo, una devoción que puede derivarse en una peligrosa obsesión.
21 dÃas, el programa mensual de reportajes, apuesta ahora por otro tema de fuerte calado social: el chabolismo. Para ello, Samanta Villar compartirá su vida con los vecinos de El Vacie, el barrio chabolista más antiguo de España: 76 años de infraviviendas a unos dos kilómetros del centro de Sevilla.Samanta Villar compartirá con ellos trabajo, casa y comida, durmiendo en una de las 50 chabolas o de las 90 casas prefabricadas que componen ahora el arrabal, para asà poder mostrar su realidad en 21 dÃas.A lo largo de sus 21 dÃas, la periodista contará con el apoyo de RocÃo y Manuel, dueños de la chabola donde dormirá.
El matrimonio tiene siete hijos y llevan más de treinta años viviendo en el asentamiento. Samanta tendrá que compartir el espacio de la chabola con el matrimonio y cuatro de sus hijos, además de dos nietos y una paya y sus tres hijos a los que han acogido en su 'hogar'. Su dÃa a dÃa será muy duro.
Tendrá que conducir la furgoneta de Manuel y ayudarle a recoger chatarra. Con RocÃo compartirá las tareas de la casa, como lavar a mano la ropa e ingeniárselas para dar de comer a una familia casi sin recursos.También conocerá a Pinto, de 29 años, el hijo mayor de Manuel que ha conseguido salir de El Vacie. Se casó con una paya, Patricia, y vive fuera del asentamiento, está totalmente integrado en su nueva vida y tiene un hijo de tres meses.
Poco a poco irá descubriendo los secretos de supervivencia en El Vacie. Descubrirá cómo los seis patriarcas toman las decisiones del poblado y el respeto que inspiran en sus vecinos. Saldrá con uno de ellos y con sus dos galgos a cazar liebres para poder comer ese dÃa.Samanta aprenderá además el poder que tiene la Iglesia Evangélica en el poblado gracias a los cultos que se celebran en una chabola del asentamiento.Pero en El Vacie no todo son penurias. Descubrirá que los niños pueden olvidarse durante unas horas de dónde viven gracias a su equipo de fútbol y que hay gente como Isabel y Francisco que se ganan la vida como guardas jurado sin necesidad de tener que vender flores en un mercadillo.